MARCA pudo saber que la intranquilidad no está empezando a calar en Renault o Fernando Alonso en el quinto día de pruebas con el R28. De hecho, el piloto no había mirado los tiempos de la jornada tres cuartos de hora después de cerrarse la pista, muestra de que el día no estaba precisamente señalado en rojo en el calendario de desarrollo de la nueva máquina.
Se es consciente de la diferencia que existe respecto a McLaren y que en esta semana no iba a haber variaciones significativas de los registros de Valencia. La principal preocupación, como adelantó Fernando en París el jueves, es la enorme cantidad de trabajo que hay por delante para empezar a limar décimas de segundo respecto a los dos grandes, pero el asturiano, pese a las cautelas públicas, confía en que el proceso sea similar al que tuvo que realizar con McLaren el año pasado. También parecían lejos de Ferrari a estas alturas de la pretemporada y logró podio en Australia (2º) y triunfo en la segunda carrera de Malasia.
En el fondo, Fernando es optimista y los datos que está recogiendo en los primeros pasos del coche, serán vitales para redefinir la aerodinámica para iniciar el campeonato. Otro dato para la tranquilidad es que rodaron con mucho combustible durante toda la jornada. Evidentemente, no saben lo que cargaba Hamilton en el MP4-23, pero no es probable que fueran más kilos de los que transportó Alonso. La única duda llega de esa primera avería de la caja de cambios.
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